Adolescencia temprana (10-13 años)

 Se comienzan a experimentar los primeros signos de la pubertad. Es un momento complicado porque los cambios físicos pueden ser abruptos y difíciles de manejar a nivel emocional.

A nivel físico se producen los primeros signos de maduración sexual, como el crecimiento de los senos en las niñas y el aumento de tamaño de los testículos en los niños, cambios en la piel, la voz y la aparición del vello corporal.

  En el plano cognitivo comienza el pensamiento ab  stracto, aunque aún se centran en el «aquí y ahora». Pueden empezar a cuestionar las normas establecidas, pero su capacidad para entender las consecuencias a largo plazo aún no está completamente desarrollada.

Social y emocionalmente empiezan a explorar su identidad, a menudo sintiéndose inseguros sobre su apariencia y comparándose con los demás. Buscan pertenecer a un grupo de amigos, lo que puede influir mucho en su autoestima. Comienzan a buscar independencia pero aún son muy dependientes de los padres.

Adolescencia media (14-17 años)

Es la etapa de la adolescencia más intensa. Los cambios físicos ya están bastante avanzados, y el adolescente comienza a desarrollar una identidad más definida. La independencia y las relaciones sociales se convierten en una prioridad.

El desarrollo físico está completo o casi completo. Se consolidan las características sexuales secundarias, como la distribución del vello corporal y el cambio en la musculatura o la figura corporal.

Es una fase de emociones intensas. Pueden sentirse incomprendidos, lo que provoca tensiones con los padres por su necesidad de independencia y su resistencia a la autoridad.

Las amistades y las relaciones amorosas empiezan a ganar peso en sus vidas.

La capacidad para pensar de manera crítica y reflexionar sobre temas complejos se desarrolla rápidamente. Comienzan a formar opiniones propias y a cuestionar las creencias familiares y sociales.

Socialmente están probando para encontrar su identidad propia. El sentido de pertenencia a un grupo social es fundamental para su autoestima.

Adolescencia tardía (18-20 años)

La identidad se consolida en esta etapa de la adolescencia. Buscan la independencia total, especialmente en términos de carrera y relaciones afectivas.

Los cambios físicos alcanzan la madurez. Las emociones se gestionan de manera más madura y reflexiva. La capacidad para planificar a largo plazo y tomar decisiones importantes, como la elección de una carrera, se fortalece.

A medida que se acercan a la adultez, buscan relaciones interpersonales más profundas y estables. La comprensión del compromiso y la intimidad aumenta.

Aunque los lazos familiares siguen siendo importantes, en esta etapa buscan una mayor independencia y autonomía, preparando su transición hacia la adultez.