Si sospechamos que nuestro hijo tiene un trastorno del habla, lo primero que tenemos que hacer es observar:
¿Cuándo tartamudea el niño?¿En qué situaciones? ¿Quiénes están presentes durante el tartamudeo? ¿Se trata de una conducta que se repite de forma continua o que sólo aparece en momentos aislados?
Es necesario saber cuando, dónde, cómo y con quién ocurre, para poder establecer la causa. En muchas ocasiones hay una predisposición genética a la tartamudez, por lo que conviene averiguar si alguno de los padres tuvo la misma dificultad cuando era niño.
Es necesario saber cuando, dónde, cómo y con quién ocurre, para poder establecer la causa.
La edad es muy importante a la hora de evaluar la situación:
- Existe una tartamudez evolutiva, que aparece en torno a los 3 o 4 años, periodo durante el cual el niño tiende a repetir las palabras, o a atascarse en la pronunciación de alguna.
- Si el niño tiene más de 5 años y continúa presentado la dificultad, o ésta se ha acentuado, es el momento de pedir ayuda para que sea un profesional quien valore la situación e intervenga.
CÓMO LE PUEDES AYUDAR EN CASA
- No termines sus frases ni le interrumpas, deja que él se exprese. Se le puede animar a que termine con palabras de aliento o una sonrisa.
- No te enfades o le menosprecies si se atasca.
- Controlar sus conductas de ansiedad del niño. Trabajar con él el miedo a tartamudear.
- Dale conversación, pero sin hacerle excesivas preguntas; anímale a hablar en los momentos en los que esté más relajado.
- Presta más atención a lo que te quiere decir y menos a cómo lo dice.
- No intentes que hable correctamente.
- Evita pedirle que hable delante de otras personas, no fuerces la situación.
- Cuidado con las expresiones faciales que dejan ver que su tartamudez te provoca rechazo.
- No corrijas ni llames la atención sobre sus repeticiones o bloqueos.
- Sé paciente cuando hable.
- Nunca le catalogues como tartamudo ni hables de su problema si está él presente.
- No castigues ni llames su atención al niño por su forma de expresarse no fluida.
EJERCICIOS QUE LE AYUDAN |
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Cómo hablarles en el entorno familiar
- Practica el habla prolongada, con una entonación normal y una pronunciación clara.
- Utiliza frases sencillas y cortas
- Elimina preguntas y evita interrupciones
- Respeta los turnos en el habla.
- Háblate a ti mismo en habla paralela: nuestras emisiones deben ser comentarios en voz alta. Estos comentarios conseguirán que se produzca la comunicación verbal sin que el niño se sienta obligado a hablar, disminuyendo así el nivel de exigencia.
Espero haberos ayudado con estas pautas y que os sean de utilidad para cualquier persona de vuestro entorno que pueda presentar falta de fluidez en el habla.
Gabriela Martinez-Villaseñor Fernández
Logopeda Colegio Alkor