Para crear un hábito debes pensar en lo que vas a conseguir, y no en lo que vas a dejar”
¿Cómo podemos crear un hábito?
A base de la reiteración y la creación de rutinas. Se trata de grabar un hábito nuevo en nuestra mente para que se automatice y lo podamos ejecutar sin que nos conlleve esfuerzo.
¿Qué condiciones hacen que esto “funcione”?
- Es importante que el hábito sea realista, que esté dentro de nuestras posibilidades, por mucho que nos propongamos practicar acrobacias, puede ser que al final nos frustremos y no podamos adoptar el hábito.
- Que sea concreto. “Hacer 20 minutos de deporte cuando me levanto” funcionará mucho mejor que “hacer deporte”.
- Encontrar una meta, es decir, que haya un “por qué” que haga que quieras coger ese hábito. El acercarte a esa meta te servirá de motivación.
- Repetir y repetir, hasta que se convierta en una costumbre… (de ahí, directo al hábito). No olvidemos que se trata de un aprendizaje.
- Ofrecernos recompensas… “después del deporte al que quiero habituarme, me relajaré con mi momento de lectura, que me encanta”
- Nuestro “futuro hábito” tiene que ocupar un lugar fijo en nuestro horario e incluso un espacio físico concreto.
- Informar a todo el mundo de nuestro “compromiso”, ayuda a no querer fallar.
- Registrar los avances, en un calendario, documento, diario, en redes sociales, mandar foto diaria a la familia… lo que sea que ayude a ver que “día tras día” lo estás logrando.
- Si no lo conseguimos, nada de culpa, revisamos las “condiciones” y modificamos lo conveniente.
Somos lo que hacemos día a día. De modo que la excelencia no es un acto, sino un hábito”
¿Qué beneficios puede tener la creación de rutinas en época de estrés?
- Mayor control y gestión del tiempo. Sentimiento de organización y por lo tanto sentir que tienes más tiempo “para ti” o para tu familia y, por lo tanto, optimización de éste.
- Mejora de la salud mental. Ya que el cerebro “pone piloto automático” cuando está realizando hábitos ya creados.
- Menos ansiedad. La anticipación y los horarios fijos nos relajan.
- Aporte de “seguridad”. Lo conocido aporta tranquilidad.
- En niños y adolescentes mejoramos su autoestima al saber lo que se espera de él y qué debe hacer y ser capaz de hacerlo correctamente.
- Si establecemos hábitos indirectamente trabajamos la constancia y la dedicación como manera de conseguir las cosas que nos proponemos.
- Conseguimos mayor autonomía en niños y adolescentes.
- Se dota de herramientas de planificación y organización.
Ana, Eva y Laura
Departamento de Orientación
Colegio Alkor